Iniciativas para fortalecer la comunicación interna en las empresas

El contexto de pandemia ha remecido la forma de relacionarse de las personas en los distintos ámbitos de la vida y también ha repercutido en la manera de hacer las cosas para conseguir este fin, y aquí las empresas y grandes compañías no se han quedado atrás.

Frente al actual escenario laboral, donde el teletrabajo ha sido sin lugar a dudas el protagonista, seguir conectados con los equipos ha sido un tremendo desafío y un proceso de adaptación para las organizaciones, que han puesto en marcha diversas iniciativas para impulsar y fortalecer las comunicaciones internas y la participación de sus colaboradores. En este sentido, representantes del mundo empresarial compartieron con el Diario Financiero los proyectos que han sido promovidos al interior de las entidades en las que se desenvuelven:

- Comunicación y diálogo permanentes. Para Pilar Dañobeitía, presidente de SMU, es fundamental no esperar el fin de un contrato colectivo para poder tener una comunicación y un diálogo efectivo con los colaboradores. “Culturalmente, empezamos a tener hábitos que nosotros proyectamos que iban a cambiar no antes de cinco o diez años. Y, sin duda, que el tema del diálogo se hizo obviamente mucho más necesario, de manera que creo que después de esto, la forma en que nosotros abordemos nuestros modelos de negocio y la forma en cómo nos comunicamos, la manera en que tomemos las decisiones -en el fondo- ahora va a ser lo que va a marcar el futuro. Sin duda, que la pandemia va a ser un período de inflexión en eso y yo creo que es una oportunidad y hay que aprovecharla”, precisó.

Apuntando al mismo objetivo, Matías Concha, consejero de SOFOFA, recalcó que lanzaron una plataforma que más allá de abordar una temática en particular de trabajo, busca establecer una mesa de diálogo permanente para tener un capital de confianza, anclado a lo social y económico.

En este ámbito también de acción, Macarena Navarrete, Country Managing Partner EY Chile, expresó que “tenemos una iniciativa que quiere ir más allá de las encuestas tradicionales de clima, más allá de saber cómo es la vida del trabajador dentro de la empresa exclusivamente, si no reconociéndole al trabajador una mayor entidad, una mayor importancia a la hora de opinar de la empresa también. Y, en ese sentido, estamos lanzando encuestas a los colaboradores que preguntan más sobre cómo sienten que contribuyen o aportan a la empresa, a la comunidad”.

- Escucha activa y participación. Luis Felipe Gazitúa, presidente de CMPC, destacó que “durante la pandemia descubrimos que igual faltaba escuchar en muchos sentidos. Nosotros hemos iniciado un proceso de pensamiento estratégico de la compañía para los próximos 50 años, de la industria forestal, y lo que hicimos, lo que diseñó la administración de la compañía, es hacer que ese proceso lo construya toda la compañía completa. Hicimos un sistema abierto de participación, para que los trabajadores se inscribieran como embajadores de este pensamiento, y tenemos 250 personas que son hoy día los embajadores de todos los niveles de la compañía, que se van a sentar a discutir y a pensar cómo ven ellos la compañía y la industria forestal en los próximos 50 años”.

- Identificar las necesidades de los trabajadores. Si hay algo que las compañías se abocan a hacer muy bien, es reconocer o tener claro lo que buscan y quieren sus consumidores para poder entregarles el producto o servicio que necesitan, mediante la segmentación de los mercados. Esto también sea hace imprescindible llevarlo al interior de las organizaciones, tal como lo recalcó el académico y empresario Hernán Rodríguez: “Es clave identificar qué es lo que quieren las personas, qué problemas tienen y cómo las empresas podemos ayudar a resolverlos”.

- Comunicación horizontal y bidireccional. José Antonio Garcés, director de Embotelladora Andina, hizo hincapié en que si bien hay muchos aspectos que se tomaban en cuenta en relación a los colaboradores en la empresa, como directores no tenían claridad sobre quiénes trabajaban en ella, dónde vivían, cuáles eran sus problemáticas, entre otros. “La administración muchas veces maneja muy bien estos temas, pero no permean hacia arriba. El hecho de tener comités nos obligó también como directores a estar muy conectados con la administración, muchas más veces de lo normal, no una o dos veces al mes, sino que prácticamente todas las semanas”, enfatizó.

 

Fuente: Diario Financiero, Lunes 19 de abril 2021

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